“Las Guerilla Girls ofrecen
una visión general de los diferentes
niveles y procesos
que consolidan el sexismo en el arte, sin olvidar
las conexiones que
estos procesos en el arte mantienen
con otras instituciones
y ámbitos culturales y sociales”
(Arakistain, 2015)
Por: Cristian
Balarezo
Este colectivo formado por mujeres
artistas empieza a formase después de la controversial muestra del MOMA, denominada
An Internacional Survey of Recent
Painting and Sculpture llevada a cabo entre los meses de enero mayo y
agosto de 1984, este evento congregó a 165 artistas de los cuales solo 14 eran
mujeres. Este suceso indignó a un grupo de jóvenes artistas neoyorquinas que se
tomaron a cargo la actividad de concientizar a los miembros responsables de;
galerías, instituciones, academias y museos para que las mujeres sean tomadas
en cuenta de forma más amplia. La protesta que empezó con grupos de mujeres
agolpadas con carteles a fuera del MOMA (imagen 1) sirvió como base para la formación
de contactos entre artistas mujeres y la creación de redes para el trabajo
colectivo.
A inicios de 1985 la
organización toma fuerza y decide emplear el cartel como soporte para exponer y
difundir sus opiniones, que son caracterizadas por poseer un sentido irónico y
humorístico (imagen 5). Los posters fueron pegados en las paredes cerca de
museos y galerías a las que previamente habían identificado como poco
inclusivos en la adquisición y exposición de obras de arte hechas por mujeres
(imagen 4).
Entre
el Marketing de Guerrilla, el Anonimato y el Activismo
El uso de carteles, posters,
esténcil y grafitis como herramientas de identificación y comunicación fueron consideradas
entre las expresiones contraculturales, puesto que fueron empleadas y
popularizadas por artistas callejeros neoyorquinos que utilizaban como soporte
a lugares públicos que no eran autorizados así la fuerza pública consideró a estas
actividades como ilegales estigmatizando a esta labor como propia de
agrupaciones delictivas. Esta forma de operar marcó una tendencia que será
asimilada e influenciará áreas como la publicidad. Es así que aparece el
termino Guerilla Marketing, acuñado por
Jay Conrad (1933-2013) en su libro Guerrilla
Marketing: Secrets for Making Big Profits from Your Small Business
(Guerrilla Marketing: Secretos para lograr grandes ganancias con su negocio
pequeño) publicado en 1984, este libro teoriza la forma de publicitar sin la necesidad
contar con costosos presupuestos y la contratación de espacios en medios de
comunicación (radio y televisión), solo hace se hace uso de ingenio del
publicista que emplea de forma creativa, materiales de bajo costo para lograr
que una campaña llegue de forma directa al público.
Esta forma de promocionarse se
hará de nuevos adeptos que emplearán, modificarán y producirán nuevos medios
para promocionar su trabajo, partiendo del concepto de tener al espacio público
como plataforma para la comunicación abierta. La tendencia es adoptada por las
Guerrilla Girls, que irrumpen en la escena neoyorquina con paredes y postes
empapelados con declaraciones directas sobre el tema discriminatorio de la
mujer en espacios artísticos (imágenes 2 y 4). El termino guerrilla es tomado con humor y entre un juego de palabras, aparece
la asociación morfológica y fonética con el termino gorila. Esta interpretación sumada a la actividad vandálica de la
agrupación, motiva que las integrantes decidan adoptar el uso de máscaras de
gorila con el fin de mantener su anonimato y llamar aún más la atención de la
prensa y de esta forma llegar al público logrando la notoriedad de la campaña
(imagen 3) (Metrópoli-Guerrilla Girls 2015).
Las cofundadoras además de
disfrazarse también han decidido tomar pseudónimos, con nombres que evocan a
destacadas artistas mujeres como por ejemplo el caso de la escultora y pintora
alemana Käthe Kollwitz (1867-1945), la pintora y poetiza mejicana Frida Khalo
(1907-1954), la escritora norteamericana Gertrude Stein (1874-1946)[1]. Dos razones motivaron la
adopción de estos seudónimos y máscaras (imagen 3), por un lado, el objetivo fue
estimular el interés por el trabajo artístico de las mujeres y el otro,
proteger su identidad del público evitando represalias por parte autoridades y
de gente que pueda sentirse incomoda con su espacio intervenido (imagen 4). La
agrupación cuenta con 55 colaboradoras, las mismas han ido rotando entre
dimisiones, sustituciones y adiciones se ha considerado mantener este número de
integrantes sin cambios (Guerrilla Girls, 1995).
Activismo
contra la Discriminación femenina
Es imposible ocultar la
existencia de discriminación femenina en todos los espacios sociales en la
actualidad no obstante durante todo el S. XX y hasta la actualidad, las mujeres
han tenido cada vez mayor participación en todas las áreas de la cultura y la
política, su participación en la comunidad ha mostrado como sus actividades y
posturas en contra del sistema patriarcal
están dotadas de varios matices que van desde lo radical como el conocido caso
de Valerie Solanas[2]
(1968-1988) y su manifiesto SCUM editado en 1968 este escrito arremete reciamente
contra la producción artística de la cual era testigo en New York “El artista
hombre intenta compensar su incapacidad para vivir y su impotencia para ser
mujer, construyendo un mundo sumamente artificial en el cual él es el héroe; es
decir, despliega las características femeninas… El fin del arte masculino no es
comunicar (puesto que el hombre es un ser vacío, nada tiene que decir), sino
disfrazar su bestialidad; recurre al simbolismo y a la oscuridad (temas
profundos)” (Robinson, 2001:12-13). Visiones de este tipo fueron compartidas
por varias mujeres que como Valerie trabajaban para poder solventar su vida y
dedicarse al cultivo de las artes, panoramas extremos como este eran comunes en
las calles de la gran manzana.
En las décadas siguientes la
población en esta ciudad siguió aumentando también la actividad económica,
artística y comercial se desarrolló. En los 70´s el panorama cultural se vio
influenciado por la irrupción del grafiti, realizado por artistas callejeros
que buscaban destacar su presencia en la urbe mediante la inscripción de sus Tags (firmas básicas de grafiti) y bombings (salidas a pintar,
bombardear) en el mayor lugar de espacios posibles, todo esto se realizaba
clandestinamente y en pocos minutos, muchas veces se trabajaba en equipo para
lograr trabajos que sorprendían por su prolijidad y el soporte empleado es el
caso de los grafitis del metro (imagen 14). Debido al trabajo colectivo para
alcanzar este tipo de objetivos que se consideraban ilegales y peligrosos puesto
que, al ser descubiertos en el acto, los practicantes de estas obras se
enfrentarían con serios problemas con la ley, pagando condenas que van entre la
prisión, pago de multas, trabajo comunitario y la reposición del espacio público
intervenido.
Este tipo de organización
clandestina y fuera de la ley será acogida en primera instancia por las
Guerrilla Girls que empezaron interviniendo las calles del SoHo que era la zona
neoyorquina donde se concentran las galerías de arte (imagen 4).
El negocio del arte parece haber
despegado en la década de los ochentas, con artistas como Jean Michel Basquiat
(1960-1988) que presentaban una nueva estética salida de la marginalidad de la
misma urbe, que trasciende a galerías y museos, renovando el ideal del sueño americano, la aspiración que tenía
la gente de prosperar y ser reconocida por su labor, estaba impregnada en todos
los aspectos sociales de esta época.
Prejuicios
arcaicos
Respecto a la escasa
participación activa de las mujeres se revela la interrogante por saber ¿cuáles
son las razones para de este suceso?
Se ha señalado a la
discriminación como principal causa, lo cierto es que referente a la exclusión
femenina se puede notar que ha estado presente en colectivos humanos desde la
antigüedad, como muestra la tradición judeocristiana que considera superior al
hombre puesto que “el varón no debe cubrir su cabeza, pues él es la imagen y
gloria de Dios, mas la mujer es la gloria del varón” (1Cor 11:7); además
existen antiguas tradiciones descritas en Midras (comentarios del Torá escritos
por rabinos) del S. XII del Talmud que cuentan la historia de la primera mujer
Lilith (precedente a Eva), ella fue creada por Dios con el mismo barro con el
que fue hecho Adán, tomado este argumento Lilith nunca se subyugó ante las
ordenes de Adán ya que se consideraba igual a este, un día Lilith enojada
pronunció el nombre mágico de dios y desapareció en el aire. Huyó del paraíso y
se unió a varios demonios con los que engendró una estirpe de diablos. Desde
ese momento se convirtió en la princesa de los súcubos que atormentaban de
forma lasciva a los hombres y también atacará a matronas, mujeres embarazadas y
recién nacidos, se la acostumbra representar con una larga cabellera, el torso
desnudo de una mujer y de la cintura para abajo el cuerpo de una serpiente.
Lilith corre con la misma suerte de Pandora la protagonista del trágico mito
griego, ambas son proscritas del colectivo y se les atribuye todos los males de
la humanidad (Bonay, 1998).
Aún siguen persistiendo
antiguas leyendas que incrementan aún más la figura maligna de la mujer, como
el caso de Filis, (amante de Alejandro Magno), que sedujo y humilló a
Aristóteles, el filósofo accedió a disfrazarse de caballo y ser cabalgado por
Filis que anteriormente le había prometido favores sexuales, pero antes de
cumplir el trato fue descubierto en tal actividad y ridiculizado frente al rey
y su corte. La moraleja tras esta historia es que hasta los más viejos y sabios
caen frente al encanto de una bella mujer (Bonay, 1998).
Del
Discurso a la Exhibición
La subyugación de la mujer
siguió siendo hegemónica durante varios siglos más incluso en el S. XIX cuando Europa
sufrió el azote de la sífilis, su transmisión sexual hizo que en primer lugar
fuera considerada a la mujer como única portadora y capaz de contagiar a los
hombres “estimaciones efectuadas en Inglaterra señalan que a finales del S.
XIX, el 66 por 100 de las prostitutas tenia sífilis” (Bonay, 1998:64). Artistas
como Baudelaire, Maupassant, Gaugin, Manet, entre otros, les dedicaron obras a
este mal del cual también fallecerán. Acrecentando las especulaciones e
infamias para el género femenino. Incluso durante el trascurso de la primera
guerra mundial aparecieron agresivas campañas lanzadas por los ejércitos participantes
del conflicto, estas operaciones alertaban sobre los peligros de tener
relaciones sexuales con mujeres en general, ya que no se conocía si alguna
podía ser portadora del mal, esto se lo hizo con el fin de advertir y asustar a
los militares que eran los más propensos a contraer la enfermedad.
Paralelamente a estos sucesos
surgió un movimiento en búsqueda de la emancipación política de la mujer, el
denominado movimiento sufragista se
manifestó en Europa y América, como objetivos principales estaban la obtención
de igualdad política. El trabajo de las Guerrilla Girls sigue esta misma
tradición. del empleo de carteles con proclamas para exigir sus derechos (imágenes
1 y 13).
Para finales de la década de
los 80´s aparece el afiche ¿Tiene que
estar desnuda una mujer para entra al Museo Met?, (imagen 6) aquí se incluye
a manera de collage a la protagonista de la obra La Gran Odalisca hecha en 1814 (imagen 7) con una cabeza de gorila,
a continuación, debajo del título se despliega esta frase: “Menos del 5% de
artistas en la selección de Arte moderno son mujeres, pero el 85% de desnudos
son mujeres”. La interpretación directa sobre esta obra es una denuncia que
impacta por sinceridad.
El huso de la ironía y el
humor se hace patente en el afiche de 1996 Cómo
disfrutar de la batalla de sexos (imagen 8) se usó la imagen de un relieve
del Friso del Mausoleo del Halicarnaso,
que data del 340 a.C. que relata la lucha entre ejércitos masculinos griegos
contra las Amazonas un ejército formado por mujeres (imagen 9). La obra de las
Guerrilla Girls emplea a la imagen del relieve y añade texto y cabezas de
gorila a las amazonas, los diálogos ironizan cuestiones esenciales en la
ontología femenina y su relación con la sociedad “mientras que el varón
envejece gradualmente, la mujer se encuentra repentinamente privada de su
feminidad. Ella es relativamente joven cuando pierde su atractivo erótico y su
fertilidad, de lo cual, de acuerdo a la sociedad y ella misma, es lo que provee
sentido a su existencia y es su oportunidad para ser feliz” (de Beavour, 2005:325-326).
Puede ser que pensamientos y situaciones similares son compartidas por muchas
mujeres que se sienten aprisionadas por el destino impuesto de ser madres y
encargarse del hogar, dejando a un lado la producción artística y superación
personal.
Los trabajos de Guerrilla
Girls en la década de los 2000 presentan un predominio del uso de imágenes y
texto a manera de collage y el diseño gráfico, se tiene como ejemplo a afiches
como; La bomba de Estrógeno de 2003[3] (imagen
10) obra de forma vertical, muestra al planeta tierra en el espacio, sobre este
se posa amenazante una píldora roja de la que salen llamas por la parte
trasera, le continua con un texto que comenta sobre cómo se paralizarían las
guerras y los conflictos si los gobernantes, generales militares y cualquier
otra persona recibiera estrógeno, a lo mejor haciendo alusión a que las mujeres
deben poseer el poder político. Frente a esta “alternativa a la política
liberal fundada en valores feministas se puede encontrar en el pensamiento maternal y el feminismo social... representados por
Sara Ruddick y Jeean Bethke” (Mouffe, 1993:10) no obstante este tipo de
vinculación con la política es analizado por Mary Diezt que critica la
vinculación del pensamiento maternal y la practica social, básicamente porque
cada una de las virtudes maternales y las políticas emergen de una actividad
especial y distintiva, una de la expresión intima entre madre e hijo. En la
ciudadanía los individuos aspiran a ser iguales y la relación madre e hijo no
aporta un modelo adecuado de ciudadanía (Mouffe, 1993).
Las diversas posturas que se
desprenden de las implicaciones de practicar las variadas propuestas feministas
dan cuenta de que su naturaleza sigue en formación ya que todavía no se han
alcanzado sus objetivos como la mayor inclusión para las mujeres en asuntos
artísticos y políticos.
Otro afiche de esta misma
década es el denominado; ¿Dónde están las
mujeres artistas de Venecia? Debajo de los hombres, esta obra junto con
otras fue exhibida en la afamada bienal de Venecia de 2005 (imagen 12), la
imagen central ha sido tomada de uno de los afiches que se utilizó para promocionar
al polémico film La Doce Vita de 1960 (imagen 13), el fondo es una fotografía
de una reunión social, en el suelo se han colocado reproducciones de pinturas en
las que figuran mujeres. Es probable que esta obra sea una alegoría de la
subyugación femenina y el juego de poder del patriarcado.
El mensaje de las Guerrilla
Girls ha trascendido por el mundo, su lucha se extendió contra todo tipo de
discriminación, el colectivo ha sido invitado hacer exposiciones y charlas
alrededor del mundo, en 1992 las integrantes protagonizaron un corto documental
llamado Guerrillas in Our Midst
dirigido por Amy Harrison, el film muestra las acciones de estas activistas
anónimas. Entre 1995 y 2012 han editado cuatro libros que compilan su
trayectoria. Actualmente viajan por el mundo exhibiendo su trabajo exponiendo
en lugares como Estambul (2006), Atenas (2007), Irlanda (2009-2010), Cracovia
(2012), Bilbao (2013), para su aniversario de 30 años se celebró una muestra
retrospectiva en el centro cultural Matadero
de Madrid el año pasado, la curación estuvo a cargo por Xavier Arakistain (1966-hasta
la actualidad) feminista, comisario y crítico de arte. Las actividades de las
Guerrilla Girls se extienden al ámbito motivacional, se sustentan económicamente
cobrando por charlas informativas y vendiendo su mercancía. Actualmente dos
integrantes son las voceras de la agrupación que ha obtenido lugares para
exhibir sus trabajos dentro de galerías y museos como el Tate Modern su última exposición
se titula Guerrilla Girls: es peor en
Europa, y está siendo exhibida en la Withechapel Gallery hasta marzo de
2017 (imagen 14) (Guerrilla Girls, 2016), comparten activamente sus actividades
en su página web www.gerrillagirls.com.
Conclusiones
En definitiva, existen varios
aspectos culturales que favorecen a la discriminación femenina dentro del mundo
del arte y la política. Gracias a los espacios ganados por el feminismo, se han
logrado institucionalizar actividades como el tokenismo, que es una práctica
laboral en la que se contrata a unos cuantos miembros de minorías para cubrir
una especie de cuota y así alcanzar una equidad participativa dentro de los
medios de producción. En mi opinión las mujeres actualmente deben
concientizarse sobre su libertad que tanto ha costado conseguirla a través de
la historia, con este fin se pueden actuar prudentemente sin caer en clichés y además
de adoptar una conducta reflexiva sobre sus actividades y pensamientos que
deben encaminarse a superar el problema de género mediante nuevas propuestas
que no partan de la idea de repetir lo mismo que hacen los hombres ya que se
cae en una estéril imitación.
Hay que mirarse como
parte del conjunto de los seres humanos, hombres y mujeres deben trabajar de
forma colectiva para la construcción y trasformación de procesos sociales,
políticos y artísticos. Para esto también los hombres deben de cambiar de
mentalidad con el fin de eliminar las jerarquías de poder que han sido
impuestas de manera sexista.
Imágenes
Imagen
2 Guerrilla Girls, Estas galerías muestran no más del 10% de
artistas mujeres o ninguna en absoluto, 1985, papel impreso, (Guerrilla
Girls, 1995:35)
Imagen
3 Guerrilla Girls, Revisando el Whitney, afiche impreso,
1987, (Guerrilla Girls, 2016)
Imagen
4 Guerrilla Girls, ¿Cuantas mujeres tuvieron exposiciones
individuales en los museos de New York el año pasado?, 1985,Afiches pegados
en el espacio público de New York. (Guerrilla Girls, 1995:36)
Imagen
5 Guerrilla Girls, Querido Coleccionista, 1986, Afiche
impreso, (Guerrilla Girls, 1995)
Imagen
7 Jean Auguste Ingres
(1780-1867), La Gran Odalisca, 1814
óleo sobre, lienzo, 91 x 162 cm, Museo de Louvre.
Imagen
8 Guerrilla Girls, Cómo disfrutar de la batalla de sexos, 1996,
Afiche impreso, (Guerrilla Girls, 2016 [1996])
Imagen
9 Detalle
del Friso del Mausoleo de Halicarnaso, relieve de piedra tallada,
340 a.C. British Museum.
Imagen 10 Guerrilla Girls, Bomba de Estrógeno, 2003, afiche impreso sobre tela, mostrado en el
festival Meltdown, Londres.
Imagen
11 Guerrilla Girls, ¿Dónde están las mujeres artistas de Venecia?
Debajo de los hombres, 2005, Afiche impreso, (Guerrilla Girls, 2016 [2005])
Imagen 12 Poster
de la película La doce Vita, dirigida
por Federico Fellini en 1960, papel impreso, Colección privada, Nipomo -
California.
Imagen 13 Sufragista norteamericanas,
(1890-1912), (El Mundo Femenino, 2014)
Imagen 14 Dos integrantes de la
agrupación, identificadas con sus seudónimos Frida Kahlo y Käthe Kollwitz, en
el fondo se ve el anuncio de la exposicón. (Guerrilla Girls, 2016)
Imagen
15 Martha Cooper, Metro de la
ciudad de New York Grafiteado, 1982, fotografía impresa, 40.4 x 50.8, (Stolen
Place, 2016).
[1]
Bajo estos seudónimos dos de las cofundadoras siguen siendo las voceras
oficiales del grupo, apareciendo constantemente en entrevistas y talleres.
[2]
Conocida por el intento de asesinato Andy Warhol, el 3 de junio de 1968 disparó
al artista, por suerte Andy se recuperó y Valeri Salió en libertad en
septiembre de 1971.
[3]
Este festival fundado por Yoko Ono (1933-hasta la actualidad), mezcla eventos
musicales y artísticos, se lo celebra anualmente desde 1993, el 2003 la fecha
en la que se presentó esta obra, el artista y productor Lee Scrach Perry (1936-
hasta la actualidad) fue el curador del festival.
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